divendres, 20 d’agost del 2010

la hora del lobo

"La hora del lobo es el momento entre la noche y la aurora cuando la mayoría de la gente muere, cuando el sueño es más profundo, cuando las pesadillas son más reales, cuando los insomnes se ven acosados por sus mayores temores, cuando los fantasmas y los demonios son más poderosos..."

y me atrevo cada día a vivir esa hora
muero cada noche por que llegue ese momento y me posea esa clase de estado sitio, ensordecedor...
así que esa noche esperamos...y llegó.
todo estaba extremadamente empapado en lascividad y miradas de " follame ya"

pero me resistí, pensé que dejarlo todo sobrevolando nuestros pensamientos era lo que más me apetecía

pero una vez más la jodí

y ahora no hay futuro
solo sábanas ajenas con mi nombre bordado en ellas

lo peor de todo es que ni siquiera valió la pena

en realidad fué una maniobra simple por parte del cordero, que predijo los actos del lobo.
él quería que se lo comieran...así que...bastaron unas palabras de socorro...y el lobo acudió corriendo hacia el cordero, pero no en su ayuda.

así que...a la mierda los cuentos.
a la mierda los instintos...a la mierda dejarse llevar.
a la mierda los humanos y sus leyes y sus normas que no dejamos de romper para autoflajelarnos y decirnos lo llenos de mierda que estamos...
así nos llenamos el vacío propio sintiendo pena de nosotros mismos, porque somos incapaces de construir nada que sea puramente nuestro.
así que machacamos lo que nos une, lo que nos identifica como hermanos, lo que otros construyeron...que genialmente estúpidos que somos.

por dios!que os jodan a todos vosotros, débiles humanos...yo me voy de este lugar...a intentar creer que el cambio temporal geográfico me hará mejor persona.



divendres, 6 d’agost del 2010

Vuelvo a casa, me siento en el suelo, enciendo un cigarro…pienso que ella tenia razón, las cosas malas siempre pasan después de las 2 de la madrugada y aún así me empeño en buscarlas…no quiero pensar…y miro a mi alrededor, está oscuro…solo hay una vela en la mesa que tengo justo delante, y la ilumina de una forma histórica, como si me explicara todo lo que ha pasado en ella con un solo destello de luz…cada minuto, cada persona que ha tocado esa superficie
Esa mesa es de madera, redonda y no muy grande…tiene quemaduras en su superficie y manchas de una larga y seductora vida…
En ella duerme ahora una botella de vino blanco a medio beber que muere recordando los labios que la lamieron…una cerveza le hace compañía a medio camino entre dos vasos llenos aún de lo que fue un billete con destino al peligro más puro y mediocre que tanto buscaron una noche dos adolescentes con pretensiones artísticas…
Pero este conjunto de objetos con pasado etílico no tendría nada de especial si no estuviera acosado por un billete que en su único día de vida me dirigió a Nuremberg, a su lado suplica ser besada una entrada para el concierto de Tegan and Sara que aunque fue la culpable que me fundiera los ojos en Londres hace poco más de un mes, supo teletransportarme a la abstracción más sensual y inesperada que jamás experimenté…a su lado reposa una vieja T10 sin la cual no hubiera llegado al monte zion la ultima noche de este Julio pegajoso, confuso, vital y simbiótico.

Y no quiero ver más que eso…miro y miro esa mesa.
Me obsesiono con la vida que hay en ella…

Desvío un segundo la mirada y me veo a mi reflejada en la ventana y iluminada igual que esa mesa.Esa misma luz que antes me hablaba a mi, ahora le cuenta al aire de esa habitación cerrada todo lo sucedido…todo lo que ha pasado por mis mejillas, a los cigarros que mis labios se entregaron esa noche, todas mis sonrisas que acompañaron de la mano a una mentira…cuánto, cómo y porque se movió cada uno de mis pelos capilares, el cuándo y dónde me hice el tatuaje que invita a entrar en mi camiseta que corté por la espalda y los laterales dejando así un trocito de mi cuerpo desnudamente visible para el mundo…mis costillas me asustan cuando observo detenidamente como hacen mover a la piel…y en el preciso momento en que me fijo como se hinchan estas al yo inhalar la ultima calada de ese moribundo cigarro que tengo entre las manos…alguien sopla la vela.

Oscuridad...creo que me enamoré de ti hoy…no me asfixies por favor.