dimecres, 29 de juny del 2016

Estoy dura,
quedé rota
rabiosa
cuando me volví a encontrar caminando en pasillos llenos
fantasmas fumando mientras me esperaban.

Por momentos me aterrorizaron, 
temblé
saqué mi arma de boca loca
y me di con la verdad en los dientes de perra.

A la vez supe recordar que ya estoy muy arriba,
dejé el miedo guardado detrás de los ojos,
me vestí con todo lo aprendido en esas tierras vivas,
supuré autenticidad de piel, bailé con demasiados cuerpos, con demasiadas carnes lúcidas como para ahora perder el tiempo gruñéndole a esos decrépitos espectros.

Confio,
en mi tinta vive todo el poder,
no me olvido,
tarantulas, polacos, 
viernes judíos, dientes de oro, 
noches de vapor terrestre, bote veloz,
en mitad de la noche de un río negro e inundando, 
un farol y la fe, 
confianza de vida, sangre de verdad, 
bordeando la muerte en esas aguas benditas de la mano de un narco,
llamas doradas,
sierras mecánicas,
magia marginal. 

Respiro más esperanza que nunca,
no me desapareceré jamás después de la calle Independencia,
me defiendo, se me salen las tripas por la sangre, no temo,
resisto, si se me terminan las ovejas, cuento conejos.

Devota optimista.

dissabte, 25 de juny del 2016


No tendría que dudar ni un poco,
ni mudarme tanto.



Te juro que yo lo intento,
y por momentos levito, 


tramito, 

pero mis ojos siguen pesando


y aunque lo que miro se descifra, 
y poco a poco se deconstruye esa verdad tenebrosa que aún preside mi pensar.

se que debería tener más violencia,

no puedo más que pronunciar atasco últimamente.

Ya sé...ya sé lo que me dirás; mientras siga trasnochando con mis dolores,
pocas salivas resultaran trascendentales al bailar en mis verbos.

Así que nada,

por el momento,

quietita me quedo.


Renuncio, 
te suelto.

Esto se termina aquí.

Sé y te aseguro que nunca supe ni tuve la manera de calcular toda la pena que sembré en tu pecho de niña, pero sucedió,

en mi manicomio propio convivo con eso.

No puedo abrazarte,
no puedo cuidarte,
nunca pude,

una nada podrida.


Te quise y te sigo queriendo

sinsentidamente, estúpidamente.

Sé que esto no se podrá reparar jamás, te dejo ir, me dejo ir...


Lograré así no temblar más, no buscarte más...suspiro hasta los pies y lloro, a mares, algo se me desgarra...quizás soy incapaz de comprender porque tardé tantísimo en poder darle un cierre a esto.


No sanamos juntas,
ahora menos y más lejos que nunca.

Ojalá hubiera sido tu madre tranquila, tu hermana valiente, tu amiga del alma.
No pude.

Me abrazo y te dejo.


Cuanto trabajo por hacer ahora,
habrá que encontrarse de cara con el vacío que trae tanta posibilidad de olvido. 


Ya estás lejos, 
estoy lejos.
Morimos,
por fin.

Sánate, vive para siempre, no te evapores nunca porfavor.
Adiós I.

dimecres, 15 de juny del 2016


La más grande de todas las coartadas,
la reiteración
el bucle.

Y aquí estoy,
cargándome otra vez la cruz a los hombros.